¡Explora la magia de la arquitectura bizantina en el Monasterio de Sumela!

¡Explora la magia de la arquitectura bizantina en el Monasterio de Sumela!

Escondida entre imponentes acantilados y envuelta en una bruma mística, se encuentra una joya arquitectónica que desafía el paso del tiempo: el Monasterio de Sumela. Ubicado en las montañas Ponticas de Trabzon, Turquía, este complejo religioso griego ortodoxo data del siglo IV d.C. y te dejará boquiabierto con su belleza inigualable.

Si eres un apasionado de la historia y la arquitectura, una visita al Monasterio de Sumela es indispensable en tu viaje por Turquía. Imagina recorrer sus estrechos senderos empedrados rodeados de exuberante vegetación mientras asciendes hacia las terrazas donde se encuentran los edificios monásticos. La vista panorámica desde la cima te dejará sin aliento, ofreciendo un lienzo verde y azul que se extiende hasta el mar Negro.

Una joya bizantina en las alturas:

El Monasterio de Sumela está construido sobre una serie de cuevas naturales, lo que le otorga un aspecto único e imponente. Sus paredes están adornadas con frescos vívidos que retratan escenas bíblicas y la vida de los santos, algunos datando del siglo XV.

Edificio Descripción
Iglesia Principal Dedicada a la Virgen María, su interior alberga un iconostasio tallado en madera, impresionantes iconos bizantinos y una colección de manuscritos antiguos.
Capilla de San Esteban Una pequeña capilla dedicada al santo patrón del monasterio, que alberga restos de santos venerados por los monjes.
Cocina Monástica Un espacio donde se preparaban las comidas para la comunidad de monjes. Su arquitectura sencilla revela el estilo de vida austero que llevaban.
Refectorio Un amplio salón donde los monjes compartían sus comidas en silencio y contemplación.

Leyendas, misterio y devoción:

La historia del Monasterio de Sumela está impregnada de leyendas y secretos. Se dice que fue fundado por dos monjes que descubrieron una imagen milagrosa de la Virgen María en un árbol. Desde entonces, el monasterio se convirtió en un lugar de peregrinación para los cristianos ortodoxos.

Durante siglos, el monasterio fue un centro cultural y religioso de gran importancia. Los monjes copiaban manuscritos antiguos, cultivaban las tierras circundantes y producían vino. Sin embargo, tras la invasión otomana, el monasterio fue abandonado y cayó en ruinas.

Restauración y renacimiento:

En el siglo XX, el Monasterio de Sumela fue restaurado por el gobierno turco, convirtiéndose en un importante atractivo turístico. Hoy en día, acoge a visitantes de todo el mundo que vienen a admirar su belleza arquitectónica y espiritual.

Recuerda que al visitar el monasterio, debes vestir con modestia y respetar las normas de comportamiento religioso. Además, la subida al monasterio puede ser desafiante debido a los escalones empinados, por lo que se recomienda llevar calzado cómodo y estar en buena condición física.

Un viaje para recordar:

Una visita al Monasterio de Sumela no solo te brindará una experiencia cultural única, sino que también te permitirá conectar con la naturaleza y reflexionar sobre la historia y la fe.

Si tienes la oportunidad de viajar a Trabzon, Turquía, no dudes en incluir este lugar mágico en tu itinerario.